En la vida todos hemos tenido a alguna persona, padres, hijos, hermanos, amigos, que vienen hacia nosotros cuando necesitan hablar con alguien al igual que lo hemos hecho nosotros mismos. Todos necesitamos ese hombro donde confiar, ese oído que nos escuche, y esa alma que nos comprenda y guie.
Sin embargo, no todas las veces confiamos nuestros sentimientos, temores, y emociones en la persona correcta. Lo mas triste es cuando entre familiares invalidamos los sentimientos de otros creyendo que no tienen el derecho de sentirse de cierta manera; te ha tocado alguna vez ir a tus padres y decirles que te sientes triste solo para oír “Pero porque te sientes triste si no te falta nada, nosotros te damos todo.”
Es de suma importancia el que cuidemos como respondemos cuando otros están buscando apoyo emocional en nosotros. Es muy fácil como padres el creer que por que proveemos todo lo que nuestros hijos necesitan ellos ‘deben’ de sentirse bien, protegidos, y amados. Otros padres creen que como viven con sus hijos están proveyendo tiempo de calidad a ellos, sin necesidad de tener charlas o continua interacción, y la sorpresa más difícil es ver a los hijos refugiarse en drogas, buscar amistades en el pandillerismo, o incluso cometer suicidio. ¿Eres tú de esos padres o madres que se la pasan viendo la televisión o viendo novelas mientras los niños juegan en la calle solos? ¿Eres tú uno de esos padres o madres que prefieren hablar con extraños en el chat, en la iglesia, con vecinos, etc. en vez de dedicarle 10 minutos de atención ininterrumpida a tu hijo?
¿Han venido tus hijos a ti con algún problema que están enfrentando actualmente? Si no has oído que tus hijos están enfrentando un problema entonces puede ser que tu no has estado disponible para escucharlos. El mundo cambia minuto a minuto y no es igual que el mundo que tu enfrentaste cuando eras pequeño; nuestros hijos tienen muchos más desafíos hoy que los que tu y yo enfrentamos tiempo atrás. Nada es igual.
Invalidar los sentimientos de tus hijos no es saludable para ellos, esto no les ayuda a gestionar sus emociones ni a sentirse arropados por ti lo que hará que otros problemas emocionales se desarrollen en ellos. Las personas que fueron criadas por padres inmaduros, negligentes, o emocionalmente no disponibles tienen una serie de problemas con su autoestima, problemas de adicciones, problemas relacionándose con otros, depresión, ataques de pánico, etc.
Muchos de los problemas emocionales de los adultos pudieron haber sido prevenidos durante la niñez. Si supieras el impacto que tendrá en tus hijos lo que haces, dices, y expresas enfrente de ellos, tendrías más cuidado y pensarías más conscientemente antes de hablar y reaccionar. ¿Que puedes hacer para validar los sentimientos de tus hijos?
Primero recuerda que el tamaño de su mundo es muy diferente del tuyo. Los hijos ven sus problemas como verdaderamente grandes y necesitan saber que cuentan con tu apoyo para resolverlos. Ensenarles a resolver problemas, a pensar por si mismos, a analizar situaciones para llegar a la mejor solución es de suma importancia para el desarrollo equilibrado del niño. Escúchalos sin interrumpirles, prestando atención a lo que dicen igual que a su lenguaje corporal, esto te ayudara a identificar si están en peligro o solo están platicando contigo. Usa preguntas para guiarles a encontrar la solución que están buscando, ellos tendrán más autonomía y comenzarán a usar su pensar critico para la toma de decisiones en el futuro. Ten calma si estos no dicen lo que tu esperas que digan o hagan, aun si te dicen algo que te provoque ira o desesperación, ellos se benefician más de tu paciencia y guía y no de que tu les digas que es lo que deben hacer y como lo deben hacer. Permíteles expresarse, aunque no te cueste trabajo, recuerda que Dios no te dio tus hijos para hacerte feliz o complacerte, te los dio para Enseñarte a ser padre o madre. Ten paciencia con ellos y, sobre todo, muestrales amor con palabras y hechos. Los niños necesitan sentir que son parte de la familia, aunque no sean perfectos, aun cuando se equivocan papa y mama los aman.
Sandra Smith
Aligning with Life with Sandra